Ciudad Madero, Tam.— El Centro de Desarrollo Infantil de Pemex en Ciudad Madero atraviesa una de sus peores etapas, de acuerdo con denuncias de trabajadoras y madres de familia que describen un escenario de deterioro, falta de atención y un clima laboral cada vez más tenso bajo la dirección de Bianca González Calderón.
Las inconformidades ya no son aisladas. Personal del CENDI asegura que la operación diaria se sostiene “como se puede” y que los problemas que antes buscaban resolverse internamente, ahora se han desbordado:
*Carencia de ropa, calzado y equipo básico.
*Cero capacitaciones.
*Plazas congeladas sin motivo claro.
*Instalaciones sin mantenimiento.
*Señalamientos sobre fallas en el sistema contraincendios.
*Gestiones administrativas que —según empleadas— se encuentran detenidas.
El punto más grave: denuncias de amenazas
Varias trabajadoras afirmaron que han recibido presiones y advertencias por parte de mandos superiores. Esta situación, repetida por distintas voces, fue lo que detonó la organización interna y las denuncias formales presentadas recientemente.
Mientras tanto, representantes sindicales han tenido que cubrir insumos básicos con recursos propios, evidenciando la falta de respuesta institucional.
Madres cuestionan el abandono
La molestia también crece entre madres usuarias del centro, quienes aseguran no comprender cómo Pemex permite el deterioro del lugar donde a diario dejan a sus hijos. Señalan retrasos, falta de comunicación y un ambiente general que genera desconfianza.
La dirección en el centro del cuestionamiento
De acuerdo con el personal, la relación con la dirección prácticamente se rompió:
no hay diálogo, no hay solución y no hay avances.
La pregunta que se repite dentro del CENDI es contundente:
¿Hasta cuándo actuará Pemex frente a esta situación?
Para trabajadoras y madres, el problema ya superó cualquier límite tolerable y apuntan directamente a la gestión actual como el origen del colapso operativo.
Y el mensaje interno ya no se disfraza ni se suaviza:
“Si la dirección no puede garantizar orden y operación, debe hacerse a un lado.”
Para muchas de ellas, el CENDI no solo está en crisis:
está tocando fondo… y afirman que lo ha hecho bajo la administración que hoy enfrenta las mayores críticas desde su llegada.
